De La COSECHA de ALMAS : "CÓMO SE DESARROLLARÁ LA COSECHA"...

La cosecha va a tener un desarrollo muy específico, una duración y un fin concreto. El motivo por el que éste hecho no se tome en cuenta, en el mundo de la conspiración, de la ufología o de la espiritualidad, lo desconozco, pero es hora de que tomemos conciencia y se conozca una de las piezas fundamentales para completar éste puzzle. El conocimiento humano, es escaso, tenemos pocos datos de quiénes somos y una pequeña apreciación de por qué estamos aquí, viviendo ésta experiencia. Ahora voy a arrojar un poco de luz sobre cómo se desarrollará nuestra trascendencia, cómó daremos el próximo paso evolutivo y su desarrollo.

Mucho se ha publicado sobre el paso de la tierra de las 3D a las 4D (alguno ha derrapado y ha hablado de 5D) y muchos de esos gurús espirituales han tocado éste tema de forma baladí y sin concretar demasiado. Sobre este paso evolutivo que vamos afrontar, debemos tener claro que no va a ser por arte de magia, por supuesto, como pretenden hacernos creer, como si fuera de hoy para mañana y ya. Ni siquiera esos grandes contactados que tienen acceso directo a otras civilizaciones más evolucionadas, nos explican nada relativo a éste hecho, si estamos o no preparados, como va a ser ésa transformación y que consecuencias traerá. También se nos ha omitido el hecho de que somos entidades cosechables, que si bien nos costó aceptar a algunos de nosotros que vivimos en una granja, ahora debemos asumir que nos cosecharán, sí o sí.

El planeta sufrirá un completo proceso de transformación
y nosotros con Ella.

Aclarar que no vamos a cambiar de dimensión, hablar de dimensiones es un error en el que frecuentemente nos meten, sino que vamos a cambiar de densidad. Ahora tenemos una densidad concreta, disfrutamos de un cuerpo físico que vibra a una frecuencia muy baja, ésta frecuencia vibratoria está acorde con la frecuencia que emite La Tierra, de no estar vibrando de forma igual a Ella, no podríamos adaptarnos ni desarrollarnos en su superficie, por lo tanto tenemos una densidad física compatible con la del planeta. Tras la pasada fecha apocalíptica de 2012, La Tierra comenzó a elevar poco a poco su vibración de dentro a fuera, siendo en el núcleo su vibración más alta que en la superficie, subiendo grado a grado, para poder adaptarnos poco a poco a éste gran cambio. Durante el inicio de elevación de la vibración, aquellos humanos que estaban trabajando (quizás sin saberlo) de una forma positiva, fueron despertando y siguieron de forma acorde esta elevación vibracional, lo que provocó que muchos de nosotros comenzáramos a asumir conocimientos que anteriormente nos era imposible acceder. Tomamos conciencia y entendimos nuestra existencia como parte de un todo, nos alejamos de viejos dogmas y asumimos nuestra realidad bajo otro prisma. Por el contrario, aquellos que no despertaron, simplemente no lo hicieron, por que no estaban listos, es decir, su vibración siguió siendo baja y su trabajo (también quizás sin saberlo) era altamente negativo.

Una vez la frecuencia vibratoria de La Tierra llegue a un punto critico, esta cambiará su densidad y nosotros con ella, pero para que ésto ocurra deberemos ser cosechados. El término cosecha puede despistar a más de uno y con razón. Este término aduce a que todos seremos cosechados, recogidos, clasificados y transportados allí donde podamos continuar nuestro trabajo. Cuando La Tierra llegue a ese citado punto crítico se iniciará la cosecha. La Tierra sufrirá una transformación completa, en su orografía y sus polos magnéticos variarán de ubicación (esto ya se está produciendo) ésto provocará que todo lo que hoy conocemos desaparecerá o será transformado de algún modo. Terremotos, erupciones volcánicas, huracanes, tsunamis, será la forma en que realizará su transformación, acompañado de una pequeña glaciación. Todo esto provocará que los continentes sufran grandes cambios, desapareciendo parte o la totalidad de alguno de ellos y emergiendo otros nuevos. No debemos tener miedo a éstos acontecimientos ya que esto significaría que sufrimos de algún apego y no hemos trabajado de la forma adecuada.

Este período de transformación planetaria, transcurrirá durante un período aproximado de tres años, éste será el período de cosecha, también se ha conocido como los tres días de oscuridad, estos tres “días” en realidad es el período en el que el planeta sufrirá una total transformación y para nada van a ser tres días corrientes (72 horas) sino planetarios o sea tres años. Pensar que el planeta será completamente transformado en ése período de tiempo tan escaso, es ridículo. Estos tres años en el que el planeta pasará su período de crisálida, el ser humano también será transformado con ella, pero su proceso será distinto.

Se nos ha vendido la idea errónea de que todos nos vamos a transformar en seres de luz casi de forma instantánea y porque sí. Los humanos elevaremos la frecuencia vibratoria junto con el planeta, pero una vez llegado a ése punto crítico, nuestro cuerpo físico, no soportará esa vibración superior, por lo tanto desencarnaremos, para volver a encarnar en nuestros nuevos vehículos físicos menos densos y adaptados al nuevo estado vibracional del planeta. Esto quiere decir que durante el proceso en el que La Tierra se transforma, nosotros seremos cosechados, es decir, pasaremos por el proceso de la mal llamada muerte. Todos pasaremos por éste trance, moriremos y según hayamos trabajado, así seremos cosechados. Puesto que el planeta va a elevar su vibración a la cuarta densidad positiva, sólo podrán encarnar en ella las almas que tengan un trabajo positivo a sus espaldas, esto quiere decir, que hayan elevado su frecuencia vibracional, mediante la Empatía, el Amor, la Compasión, el Perdón y el Conocimiento.

Tras la Cosecha una Nueva Tierra Nacerá.

Tras la cosecha, la densidad física de los cuerpos será más sutil, nuestra vibración será más alta que la actual, nuestra civilización será completamente distinta, así como sus valores y sus principios. Marcarnos el objetivo de continuar nuestro trabajo evolutivo en éste planeta pasa por cambiar nuestra aptitud y nuestra visión de la vida hacia un paradigma nuevo, más positivo y carente de miedos y prejuicios, abandonar falsas creencias basadas en la culpa y permitir fluir nuestras emociones, sanándonos de toda negatividad que arrastremos por traumas pasados.

El planeta está ahora en un impás, esperando a una reacción por nuestra parte, pero no esperará eternamente. No sé exactamente cuándo iniciará su proceso de cambio, pero es de esperar que éste comience pronto. El colapso  de nuestra civilización (crisis) está provocando que muchos de nosotros hayamos iniciado un trabajo por la comunidad, este trabajo, provocará que se produzca una especie de contagio y servirá para que aquellos que nos rodean comiencen a elevar su frecuencia y comenzar a trabajar de forma positiva.  Las vidas regidas por el materialismo y el dinero, por falsos egos y sentimientos posesivos, permanecerán sumidas en la ignorancia, pertenecen al viejo modelo de civilización que ahora se hace añicos y que cae por su propio peso, un modelo de vida erróneo, del que es necesario desprenderse definitivamente.

Este período de crisis que vivimos no es más que la lanzadera para que el humano salga de su zona de confort e inicie su proceso de despertar, esa aventura hacia lo desconocido que nos trasforma y nos completa, nos hace seres conscientes, plenos, sabios y con conciencia de sí mismos. Quizá no tengamos claro nuestro pasado, pero ya va siendo hora que conozcamos nuestro futuro.

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Re-Publicado por ANSHELINA, la Luz que llama a despertar

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