jueves, 7 de octubre de 2010

DE: LA FUENTE CREADORA... "Alcanzando a Todos Los Seres y Manteniéndolos en un Fundido Abrazo de Amor"...

Esas almas, con deterioro en la memoria, necesitan ahora un pequeño impulso, de todos aquellos que han comenzado a recordar su Origen, y permitir que se ilumine la Luz interior de cada uno, para que brille cada vez más.



1) RESUMEN

Hubo una vez una Luz, que brotó del centro de éste Universo. Esta Luz era muy intensa, poderosa y fecunda, con posibilidades infinitas de manifestación divina que dio a luz a una poderosa Creación, que hasta éste día, continúa expandiéndose y haciéndose cada vez más perfecta. 

En el corazón de ésta deslumbrante Luz, se encuentra una Fuerza que es el Origen de todo lo que existe. Este máximo Poder es el Poder del Amor, y cada Alma individual que ha emanado con el tiempo de ésta Fuente inicial, está dotada con la misma Chispa voluntaria de Amor, que puede crear lo que sea su voluntad y hacerlo existir. 

Porque muchas almas en éste planeta, han perdido el contacto con su Poder interior de Amor; a medida que se han sumergido profundamente en el mundo material, han experimentado un descenso gradual en el abismo de la conciencia solitaria. 

Habiendo olvidado Quiénes son realmente, éstos son seres de Luz y Amor infinitos, que están experimentando algunas de las múltiples posibilidades ofrecidas por la Fuente Creadora, en éste amplio campo de experiencias de pensamiento-forma existentes. 

Esas almas, con deterioro en la memoria, necesitan ahora un pequeño impulso, de todos aquellos que han comenzado a recordar su Origen, y permitir que se ilumine la Luz interior de cada uno, para que brille cada vez más.

Este servicio vital que se les pide, puede y tendrá, un profundo efecto en la conciencia de todas las almas de los seres de la Tierra, a medida que gradualmente experimentarán aún más claros vislumbres de su verdadera naturaleza, y por lo tanto, eventualmente, recobrar su completa conciencia de la Unidad. 

Pero para que tal despertar ocurra, cada uno de nosotros, necesitamos primero eliminar cualquier sentimiento residual de soledad, que pudiéramos aún albergar subconscientemente, como un remanente de la programación cultural que hemos sufrido, desde que encarnamos en éste cuerpo, con el primer aliento de nuestro nacimiento. 

Esto es a lo que será dedicado el primer segmento de 10 minutos de nuestra próxima meditación de cuatro domingos.

Obtener un nivel adecuado de conciencia... 

Todo lo que tenemos que hacer primero, es usar las cuatro Llaves de Recuerdo, proporcionadas hasta ahora a través de la expresión sucesiva. 

Desde el más sagrado santuario de tu conciencia del alma, con suficiente pausa, entra cada una para imprimir completamente todo tu Yo, con su resonancia y evocador poder: 

YO SOY LUZ… 
YO SOY AMOR… 
YO SOY PAZ… 
YO SOY ARMONÍA… 

Y al hacerlo, sé consiente de que al mismo tiempo, un sinnúmero de otras almas... están en el mismo proceso en todo el mundo; ésta sintonización de voluntades sincrónicas, con la conciencia inmanente de su eterna Unidad.

Después, en el segundo segmento de 10 minutos, resonando como Uno con Todo lo que ES, cada uno pensará y voluntariamente expresará: “Yo ahora llego a todas las almas de los seres de la Tierra”... 

Mientras que siendo totalmente conscientes que el “Yo” que así expresa su voluntad es el “Yo” colectivo, entonces estaremos formando así, una ruptura en la efímera e ilusoria barrera de nuestra auto contenida conciencia de soledad; y colectivamente experimentando un nuevo nivel de Conciencia de Unidad. 

A medida que el “Yo” colectivo extiende su abrazo abarcador, para alcanzar hasta el corazón de cada alma encarnada y desencarnada en la Tierra; entonces será expresado: “Yo los tengo a todos en mi corazón, y los cubro a todos con mi Amor”

Por lo tanto, la Luz sanará el sentido de separación,  encendiendo el poder del Amor almacenado, que había permanecido dormido por incontables milenios, a través del Viaje de terapia Kármica, en el vasto seno de éste maravilloso universo. 

En el último segmento de 10 minutos, mientras que el “Yo” colectivo es entonces guiado, momento a momento: 

"Dirigirá sucesivamente su abrazo global de Amor, para tocar con su Gracia sanadora, el alma de todos los Seres en cada continente, y así garantizar, que ninguna de ellas quede fuera del Campo de Amor, que reavivará cada vez la memoria de Unidad con la Fuente"... 

"Y así completará su servicio de Iluminación colectiva, a través de la inclusión de otros seres vivos sensibles en su abrazo, desde las más pequeñas formas de vida, hasta ésta gran esfera global de Vida en sí misma, por el mayor bienestar de Todos como Uno".

Punto de meditación #216. 

Publicado por:Luisa Vasconcellos



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