UNIDAD
MYTRA CONTINÚA:
Dormimos juntos en un pequeño hueco con su ropa de cama usada. Sin embargo, tenía algo puesto debajo de ella, y era increíblemente cálida y suave. Durmió resonando tan dulcemente como un bebé. Yo, por supuesto, dormí muy poco. Primero, mi mente no paraba. Todo en lo que una vez creí, toda la estructura, lecciones, disciplina y obediencia con la que crecí, había sido revelada como el viejo paradigma de mi vida pasada.
Mientras estaba recostado allí con su cálido cuerpo al lado del mío, de hecho, MUY cerca del mío, supe que había cambiado para siempre. No tenía idea en qué había cambiado, pero era positivo que el “yo” que usualmente era, había muerto de una muerte repentina. Mientras estaba recostado en la cálida oscuridad con el aroma de su cuerpo llenando mi corazón, reví mi vida. Nací en una familia militar. No había oportunidad de elección de lo que debería hacer. Por supuesto, sería un militar. Fue el legado de mi familia proteger nuestro mundo, nuestra forma de vida.
Sin embargo, desde que vinimos a este planeta, nuestra realidad ha cambiado vastamente. Por primera vez en mi vida, la cual era más o menos 90 años de los suyos, siendo un adulto joven, no SABIA lo que sería mi vida. Antes nuestra gente era capaz de “bajar la guardia” y sentirse seguro en nuestro nuevo hogar, tenía una importante contribución. Al ver a otros asentarse y cambiar su perspectiva de vida, permanecí fuertemente en el adoctrinamiento que había tenido desde mi nacimiento.
Quizás era una persona única, y quizás podría encontrar una experiencia única de vida que fuese diferente a la de todas las generaciones de nuestra brava y orgullosa herencia? Este tipo de pensamiento había estado escondido en mi cabeza desde que era un niño pequeño. Desde entonces, nunca había permitido a esos pensamientos venir a la superficie. Entonces, literalmente corrí hacia una mujer, experimentando enteramente su única experiencia de vida. Fue entonces que esos ocultos pensamientos de la niñez comenzaron su camino a la superficie.
¿Cómo podía echar a un lado todo aquello por lo que había permanecido de pie, todo aquello que pensaba que me definía como un hombre poderoso, y todo aquello que pensaba que amaba? Ahora, en una larga noche, me había vuelto una persona totalmente diferente. Sin embargo, no conocía a esta nueva persona, por lo tanto no tenía idea de quién era o lo que haría. Sólo sabía que no podría regresar a nuestra villa en este estado de confusión.
Como si ella hubiera escuchado mis pensamientos, Mytria se dio vuelta para quedar enfrente mío con los ojos abiertos y una sonrisa. Ahora no había preguntas. No sólo no podría regresar a una vida que se había vuelto falta de significado, no podría dejar aquella sonrisa.
Mytria se levantó despacio y comenzó su pequeño fuego. La observé poner agua en su pequeña vasija para hacer NUESTRO té, luego fue afuera, lo más seguro que a asearse. Sin ella a mi lado, me sentía solo. ¿Cómo podía ser esto? La había conocido recién, pero sentía que siempre habíamos estado juntos.
Mientras ella se había ido, fui a mi bolso y tomé mi dispositivo de comunicación. Pero no funcionaba aquí. Quizás era la cueva, pensé levantarme e ir afuera para usarlo. Antes de que siquiera se diera vuelta, dijo, “Tu dispositivo no funcionará aquí. Hay un escudo etérico alrededor de esta área, y la tecnología no funciona aquí. Créeme, intenté hacerlo”. Cuando se volvió a mí para continuar hablando, experimenté el mismo sentimiento de reconocimiento y ninguna duda tenía sobre permanecer desvanecido.
“Decidiste quedarte?”.
“Siempre lees mi pensamiento”, dije con una sonrisa en mi voz“.
"Sólo cuando estás pensando sobre mi“, sonrió de retorno. “¿Estás evitando mi pregunta?”.
“Si”, dije. “Estaba pensando que deberías preguntar tú primero”.
“Sí”
“Si, debería preguntarte o si debería quedarme?”.
“Sí, me encantaría conocerte más y mostrarte mi mundo”.
“Deberé decirles que estás a salvo y que yo aún no retornaré”.
“¿Destruirás el dispositivo?”.
No tenía el pensamiento de hacer de mi decisión algo permanente, tan inalterable, pero me había dado cuenta que el tipo de cambio que estaba enfrentando me llevaría a mi total compromiso.
“Sí”.
“¿Me ayudarías a encontrar algunos huevos? Les pediré a los pájaros si pueden darnos uno para nosotros”-
Después de haber comido los huevos y más plantas deliciosas, que había sazonado con sus hierbas desconocidas, me mostró el portal fuera del campo de energía y giró para volver a su hogar.
“¿No vas conmigo para asegurarte de que destruyo el dispositivo?”. Dije bromeando.
“Confío en ti”. Dijo ella y se dio vuelta.
Su confianza fue la parte más asombrosa de mi experiencia. No sólo confiaba totalmente en mi, lo que había dicho fue porque me conocía, también confiaba totalmente en la Naturaleza. Vivía cada momento en unidad con el planeta y la flora y fauna con la que había compartido su vida. No había diferencia entre lo que estaba vivo y lo que era cosa. Cada uno de ellos, incluso una roca, estaba viva en su mundo.
Quería compartir su mundo, pero mi mente científica se revelaba ante este novel pensamiento. Nunca me había dado cuenta cuán adoctrinado era, hasta que traté de cambiar mi mente. Por otro lado, mi cuerpo no mostró resistencia al cambio. Rápidamente olvidé mi uniforme y sólo vestía lo que usaba para dormir. El clima era usualmente muy cálido en el día y frío en la noche, pero nuestra cama era siempre cálida.
Cuando no estaba tan frío, podíamos dormir afuera y me mostraba todas las estrellas del Sistema que había encontrado. Era capaz de decir muchos de los nombres oficiales, pero usualmente prefería sus nombres para ellas. En el día, dábamos largas caminatas, así podía mostrarme todo el territorio que ella había mapeado. La asistí con eso. Había una planta que crecía a la orilla del río, que había aprendido a aplastar en una especie de papel y podía escribir en él con “tinta” que era extraída de un cierto árbol.
Otras plantas podían ser secadas y tejidas en una tela, de la cual hacía un extraordinario y confortable vestido. También me mostró de dónde eran todas las plantas comestibles, así como la fuente de su miel. Me mostró cómo estar tan quieto que un pájaro podía bajar en mi hombro y tan quieto que podía escuchar el latido de mi corazón.
Afortunadamente, no era inútil. Tuve la fortaleza que a ella le faltaba y unas pocas herramientas, que nos permitieron hacer nuestro hogar aún más confortable. Sí, era NUESTRO hogar. Vivimos en él como una persona, compartiendo todas las tareas sin ningún conflicto o deber. Si algo debía ser hecho, lo hacíamos. Sin embargo, teníamos nuestras especialidades. Si necesitábamos construir o mover algo, era llamado. Por otro lado, si necesitábamos consultar a la Madre, ella la llamaba.
El día que ella me dijo que era hora de ser UNO con el planeta Madre, le dije que no tenía idea cómo hacer eso, y francamente, no pensé que la Madre quisiera ser UNO conmigo.
“¿Cómo puedes decir eso?” dijo con una voz shockeada.
“No soy puro como tú. He matado varios seres y destruido mucha tierra. He sido un guerrero, donde el amor del que hablas es una señal de debilidad y la confianza que sostienes es una mera tontería”.
“¿Te SIENTES de esa forma?”.
Tuve que pensar antes de contestarle. Ella merecía una respuesta verdadera, y no sabía mi verdad aún. Por lo tanto, todo lo que pude decir fue, “ Me sentí de esa forma una vez, pero ese yo no está más. No conozco este nuevo yo, lo suficiente para contestar tu pregunta. Te creo, y veo la gran fortaleza que has ganado, no por dominación, sino a través de la entrega. Sin embargo, no pienso que me es posible conectarme con algo tan vago como la Gran Madre”.
“No necesitas entregarte a Ella, porque Yo Soy Su representante. Por lo tanto, puedes entregarte a mí. Es usualmente de esa forma con los hombres. Sus mentes están llenas con protección y deber. Sólo el profundo amor con una mujer, les permite liberar sus protecciones y entregarse totalmente”.
“¿Cómo supiste que te amo profundamente? Ni siquiera pensé que me conocía a mí mismo hasta que dijiste esas palabras”.
Sin decir palabra, ella me llevó dentro de nuestra cueva para darme la “prueba” que necesitaba.
Al fundirnos en nuestro amor, nuestra conciencia se mezcló tan profundamente que podía sentir cómo ella comulgaba con toda la vida. Con ese sentimiento compartido entre nosotros, me mostró cómo tocar la tierra, encontrar el agua, oler una planta y ponerla en mi corazón para determinar si era segura para comer, cómo pedirle a un ave un huevo, cómo leer el clima mucho antes de que cambie, y cómo mirar dentro de mi SER.
“Tu relación con la Madre depende de tu relación con tu SER”. Me dijo una y otra vez. Al comienzo, la relación con mi Ser no sólo venía como producto de mi relación con ella. Nunca me habían enseñado a tener una relación con mi SER. Fui enseñado a seguir órdenes, cumplir deberes y obedecer a mis comandantes oficiales. Había pasado mi vida siendo el “efecto” de una “causa” externa. Si tenía éxito en mi emprendimiento, estaba feliz y orgulloso de mí mismo. Si erraba en mi deber, era avergonzado y estaba enojado conmigo mismo.
No había oído de la “más grande” o “elevada” versión de mi SER de la que Mytria me hablaba. La única gran parte de mí sería mis compañeros guerreros, y mi ser superior eran mis comandantes oficiales. Vivía en las afueras de mí mismo. Dentro de mí había huesos y sangre y órganos que de alguna forma sobrevivían las innumerables heridas. No tenía el concepto de mi espíritu, o del yo etérico que Mytria decía que se sumergía con él en el Corazón. De hecho, no tenía el concepto de esa experiencia que no fuera un “sueño sexy”.
Finalmente tenía que confiar en alguien. Confié en Mytria absolutamente y completamente. Confié que ella pudiera hacer que mis energías subieran desde mi espina hacia mi corazón, o dentro de mi mente. Sin embargo, no tenía el concepto de que podía lograr esto sin su ayuda. Era este concepto el que me inquietaba grandemente. ¿Me estaba volviendo hipnotizado, por alguien que me estaba mostrando una visión de la realidad que nunca podría ser mía?
Nuevamente, ella leyó mis pensamientos. “Pienso que has tenido lo suficiente por ahora. Es tiempo de seguir con tu búsqueda de la visión”.
“¿Búsqueda de la visión? ¿Qué es eso?”. Dije de una manera enojada. Ella estaba cansada de ser mi maestra, ya que me había vuelto débil ante sus ojos, pensé. Esta experiencia entera era una fantasía, una excusa para ignorar mis deberes. ¿En que había estado pensando? ¿Cómo había podido osar ser diferente a todos los hombres por tantas generaciones? Una búsqueda de la visión, HA, vete de mi casa es más como eso”.
Mytria no se enganchó en mi batalla interior. Sólo dio vuelta y fue dentro de la cueva.
A través de: Suzanne Lie, PhD
28/05/2012
http://suzanneliephd.blogspot.com/
Traducción al español: – Shanti
http://arcturusmihogar.blogspot.com/
Publicado por: Juan Pablo en 23:16